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Mil millones de gracias
Hoy hace dos años que empecé este blog.
En este tiempo muchas cosas han cambiado, otras no tanto. Pero la que más ha cambiado he sido yo.
Lo empecé en un momento de mi vida en el que sentía que muchas cosas se tambaleaban. Sólo me sentía segura con mi familia, incondicional.
Por aquel entonces mi corazón aún sangraba por la ruptura con quien ha sido la persona más importante en mi vida hasta la fecha y andaba bastante perdida, intentando sentir que encajaba en alguna parte. Intentándolo con fuerza, con demasiada.
El tiempo ha ido pasando y yo he ido avanzando, creciendo, madurando, descubriendo cosas importantes. Como que es vital aprender a estar solo y como que a veces hay que dejar de intentar con tanto ahínco para que las cosas simplemente sucedan y para bien.
Quiero daros las gracias. A todos los que me habéis acompañado durante estos dos años, a los incondicionales, a los que están aquí desde el principio, a los que os habéis ido uniendo. A los que casi siempre habéis dejado comentarios y os habéis hecho notar y a los que me habéis estado leyendo en silencio en esta suerte de viaje. Quiero mencionar a algunos de los más presentes, y espero no dejarme a nadie. Gracias a Alejandro, con su apoyo tan sólido, que ha trascendido lo meramente virtual. Gracias a Juanan, que me ha devuelto la fe en que las personas pueden cambiar su punto de vista. Gracias a CarlosM que, aunque últimamente no se pasa mucho, me ha hecho reír desde el mismo principio de este blog con sus comentarios. Gracias a Zruspa_JB porque, aunque no siempre hemos estado conectados ni hemos coincidido, me ha mostrado su valor. Gracias a Fan por darme su amistad. Gracias también a los que "conozco" menos por tiempo o por intensidad, pero habéis estado ahí: Adriano, Aiakides, claudia, AM Editorial, Onara, Briseida, rocio, macniccolo, oligoqueto, Tuga, EMT, Jo T., Mujeralostreintaytantos, Pérfida, RaulS77, PequeñoLins, Macoca, Angie, un ratón, Sirenita, Sole, Miguel Angel, Aniwiki, Ana de Valencia, Nereida, Juli, Xavier, Aliena, Montse, la gata, Luu, aperador... A todos, mil millones de gracias.
Quiero dar las gracias también a los anónimos, especialmente a los trolls. A toda esa gente que me ha criticado, juzgado y, a veces, incluso insultado. Gracias. Gracias porque aún recuerdo el primer juicio de valor sobre mí y cómo me indignó que os atrevieráis a decirme cómo debería ser o cómo debería actuar sin conocerme de nada ni ser ningún tipo de autoridad moral. Y las gracias son especialmente por cómo ahora he llegado a reírme a carcajada limpia con vuestros juicios infundados y con vuestros insultos. Me habéis ayudado a crecer y a darme cuenta de lo poco que me importa ni me debe importar lo que otros, sobre todo anónimos, piensen de mí.
Llevaba tiempo pensando en qué hacer para celebrar este segundo aniversario y, como siempre (ya me conocéis), no se me ocurría qué hacer. Los concursos está claro que no son lo mío, los regalos espontáneos tampoco (sólo he tenido que preparar 3 regalos para los Españoles por el mundo). Pensé en colgar una foto mía por un par de horas, pero no encontré la forma de hacer que no se pudiese descargar y últimamente ando muy mosqueada con el tema de la privacidad en la red.
Y al final resulta que lo que voy a hacer hoy, día del segundo aniversario de mi blog, es cerrarlo.
Como ya os he ido dejando entrever, últimamente tengo muchos frentes abiertos. Lamentablemente muchos de ellos (y lo que es peor, los más importantes) no puedo tratarlos abiertamente aquí, en mi rincón, para que al menos me sirva de terapia, y lo cierto es que tantas incertidumbres que llevo sobre mis hombros y tantos asuntos por concluir me están afectando. Necesito cambiar de vida . Empiezo por aquí y luego seguiré por ti. Por supuesto que este blog no tiene la culpa pero, y aunque os pueda parecer que no, conlleva cierta energía llevarlo adelante, pensar y escribir las entradas, moderar los comentarios, estar al día con el resto de blogs. Y ahora mismo necesito esa energía para concentrarme en cosas, si no más importantes, sí más "vitales". Necesito la energía para poder emprender proyectos ilusionantes que tengo a medias y que están relacionados con mi futuro. Para poder ir atando cabos y cerrando asuntos. Cuando hablo de cerrar el blog, me refiero también a mi vida virtual. Seguramente no podré resistir la tentación de leeros a algunos aunque sea en silencio, pero necesito desconectar y, como diría El Chojin, centrarme en lo importante y olvidarme del ruido.
Me dejo muchas cosas importantes relacionadas con esta vida virtual mía, cosas a medias que no he terminado y cosas que llevo tiempo rumiando y que aún no he hecho. Por eso no quiero que sea un cierre definitivo, me gustaría pensar que se tratará de algunas semanas (dos, tres, cuatro a lo sumo), pero quiero ser honesta con vosotros y conmigo misma y lo cierto es que no tengo ni idea. Si vuelvo, sé que muchos ya no estaréis, que perderé seguidores aquí y en Twitter, pero lo comprendo y no pasa nada, eso no es lo importante, lo realmente importante en esta vida es, como alguien muy sabio me dijo una vez, seguir respirando y ser feliz.
Así que en mi ausencia, bien sea larga o corta, no os olvidéis de esas dos máximas: seguid respirando y sed felices.
... y de nuevo, mil gracias a todos...
En este tiempo muchas cosas han cambiado, otras no tanto. Pero la que más ha cambiado he sido yo.
Lo empecé en un momento de mi vida en el que sentía que muchas cosas se tambaleaban. Sólo me sentía segura con mi familia, incondicional.
Por aquel entonces mi corazón aún sangraba por la ruptura con quien ha sido la persona más importante en mi vida hasta la fecha y andaba bastante perdida, intentando sentir que encajaba en alguna parte. Intentándolo con fuerza, con demasiada.
El tiempo ha ido pasando y yo he ido avanzando, creciendo, madurando, descubriendo cosas importantes. Como que es vital aprender a estar solo y como que a veces hay que dejar de intentar con tanto ahínco para que las cosas simplemente sucedan y para bien.
Quiero daros las gracias. A todos los que me habéis acompañado durante estos dos años, a los incondicionales, a los que están aquí desde el principio, a los que os habéis ido uniendo. A los que casi siempre habéis dejado comentarios y os habéis hecho notar y a los que me habéis estado leyendo en silencio en esta suerte de viaje. Quiero mencionar a algunos de los más presentes, y espero no dejarme a nadie. Gracias a Alejandro, con su apoyo tan sólido, que ha trascendido lo meramente virtual. Gracias a Juanan, que me ha devuelto la fe en que las personas pueden cambiar su punto de vista. Gracias a CarlosM que, aunque últimamente no se pasa mucho, me ha hecho reír desde el mismo principio de este blog con sus comentarios. Gracias a Zruspa_JB porque, aunque no siempre hemos estado conectados ni hemos coincidido, me ha mostrado su valor. Gracias a Fan por darme su amistad. Gracias también a los que "conozco" menos por tiempo o por intensidad, pero habéis estado ahí: Adriano, Aiakides, claudia, AM Editorial, Onara, Briseida, rocio, macniccolo, oligoqueto, Tuga, EMT, Jo T., Mujeralostreintaytantos, Pérfida, RaulS77, PequeñoLins, Macoca, Angie, un ratón, Sirenita, Sole, Miguel Angel, Aniwiki, Ana de Valencia, Nereida, Juli, Xavier, Aliena, Montse, la gata, Luu, aperador... A todos, mil millones de gracias.
Quiero dar las gracias también a los anónimos, especialmente a los trolls. A toda esa gente que me ha criticado, juzgado y, a veces, incluso insultado. Gracias. Gracias porque aún recuerdo el primer juicio de valor sobre mí y cómo me indignó que os atrevieráis a decirme cómo debería ser o cómo debería actuar sin conocerme de nada ni ser ningún tipo de autoridad moral. Y las gracias son especialmente por cómo ahora he llegado a reírme a carcajada limpia con vuestros juicios infundados y con vuestros insultos. Me habéis ayudado a crecer y a darme cuenta de lo poco que me importa ni me debe importar lo que otros, sobre todo anónimos, piensen de mí.
Llevaba tiempo pensando en qué hacer para celebrar este segundo aniversario y, como siempre (ya me conocéis), no se me ocurría qué hacer. Los concursos está claro que no son lo mío, los regalos espontáneos tampoco (sólo he tenido que preparar 3 regalos para los Españoles por el mundo). Pensé en colgar una foto mía por un par de horas, pero no encontré la forma de hacer que no se pudiese descargar y últimamente ando muy mosqueada con el tema de la privacidad en la red.
Y al final resulta que lo que voy a hacer hoy, día del segundo aniversario de mi blog, es cerrarlo.
Como ya os he ido dejando entrever, últimamente tengo muchos frentes abiertos. Lamentablemente muchos de ellos (y lo que es peor, los más importantes) no puedo tratarlos abiertamente aquí, en mi rincón, para que al menos me sirva de terapia, y lo cierto es que tantas incertidumbres que llevo sobre mis hombros y tantos asuntos por concluir me están afectando. Necesito cambiar de vida . Empiezo por aquí y luego seguiré por ti. Por supuesto que este blog no tiene la culpa pero, y aunque os pueda parecer que no, conlleva cierta energía llevarlo adelante, pensar y escribir las entradas, moderar los comentarios, estar al día con el resto de blogs. Y ahora mismo necesito esa energía para concentrarme en cosas, si no más importantes, sí más "vitales". Necesito la energía para poder emprender proyectos ilusionantes que tengo a medias y que están relacionados con mi futuro. Para poder ir atando cabos y cerrando asuntos. Cuando hablo de cerrar el blog, me refiero también a mi vida virtual. Seguramente no podré resistir la tentación de leeros a algunos aunque sea en silencio, pero necesito desconectar y, como diría El Chojin, centrarme en lo importante y olvidarme del ruido.
Me dejo muchas cosas importantes relacionadas con esta vida virtual mía, cosas a medias que no he terminado y cosas que llevo tiempo rumiando y que aún no he hecho. Por eso no quiero que sea un cierre definitivo, me gustaría pensar que se tratará de algunas semanas (dos, tres, cuatro a lo sumo), pero quiero ser honesta con vosotros y conmigo misma y lo cierto es que no tengo ni idea. Si vuelvo, sé que muchos ya no estaréis, que perderé seguidores aquí y en Twitter, pero lo comprendo y no pasa nada, eso no es lo importante, lo realmente importante en esta vida es, como alguien muy sabio me dijo una vez, seguir respirando y ser feliz.
Así que en mi ausencia, bien sea larga o corta, no os olvidéis de esas dos máximas: seguid respirando y sed felices.
... y de nuevo, mil gracias a todos...
